Bueno pues ya estamos metidos de cabeza en el verano; playa, vacaciones, descanso… todos estos términos evocan a esta época del año que esperamos con tanto deseo. Pero ¿qué pasa con el calor?… pues que también va con el verano, al menos en España, claro 🙂

Ocurre que si tú lo pasas mal imagínate tus mascotas en verano, que además de no poder hablar y contártelo directamente, su organismo no está tan bien preparado para el calor como el de los humanos.

Perros y gatos expulsan su exceso de calor por la boca y patas, concretamente por sus almohadillas, pero esto puede no ser suficiente para las temperaturas tan altas que sufrimos en España.

… ni hablar si nos referimos a lugares del sur.

Consejos para proteger a tus mascotas en verano

Evidentemente cada animal tiene sus características, sus peculiaridades fisiológicas y sus necesidades, pero nos vamos a centrar en perros y gatos.

1. Aplica el sentido común, evita las horas de calor

A ver tú eres el humano, el que razona y el que en teoría puedes poner en práctica eso del «sentido común» 🙂

¿A las tres de la tarde de cualquier día de Agosto se te ocurre dar un paseo por la calle? Seguramente no, porque ese paseo se puede convertir en un infierno y podrías sufrir un golpe de calor.

Pues aplica ese mismo razonamiento para tu mascota. Además del sofoco, pueden sufrir lesiones en sus patas y estas podrían resentirse por las altas temperaturas de aceras y asfalto.

No saques a pasear a tu mascota a estas horas del día, trata de readaptar tu horario a las horas menos intensas de calor. Ellos no disponen de un sistema de glándulas de sudoración como el nuestro y los riesgos de sufrir un golpe de calor se multiplican a esas horas.

También debes de evitar esas horas para realizar juegos y ejercicios, si los exponemos a una exigencia física mayor estaremos aumentando el riesgo.

Para la comida también aplica esta regla. Hacer que tu mascota coma en las horas de fuerte exposición solar puede provocar problemas de indigestión y vómitos.

2. Baños refrescantes y cortes de pelo

No rapes a tus mascotas en verano y más si son muy peludos, pues es este pelo el que les protege de la radiación solar. La piel de perros y gatos no está preparada para el sol, con lo que si se exponen a él directamente pueden sufrir quemaduras. ¡Córtales el pelo, pero no te pases!

Refrescarse también le vendrá bien. En sus paseos refrigerar su cabeza o bañarse en lugares que esté permitido les sentará de maravilla.

3. Procura que estén en lugares ventilados y frescos

Otra norma de sentido común, pero que se convierte en norma vital si se trata de nuestros animales, ellos pueden sufrir más aún que nosotros.

Evita que permanezcan mucho tiempo en lugares agobiantes o habitáculos cerrados, pueden sufrir deshidratación.

Por ese motivo nunca dejes a tu perro encerrado en el coche con las ventanillas subidas mientras tú haces los recados.

Dentro de un vehículo al sol se pueden alcanzar temperaturas de ¡hasta 60 grados!

Para que veas un ejemplo de lo que te contamos, en este vídeo se ve como un agente salva la vida a un perro a punto de la asfixia. Seguramente si llega minutos más tarde no hubiese sobrevivido.

4. Siempre cerca del agua

Mantenerse hidratado es la regla número uno que aconsejan todos los médicos y veterinarios. Mantén siempre su bebedero con agua fresca y evita que beban de fuentes u otros lugares donde desconocemos la procedencia del agua.

Con el calor hay que tener especial atención con las aguas estancadas.

Bueno pues hasta aquí estas cuatro reglas para proteger a tu mascota en verano. No obstante, si tu perro o gato sufre un golpe de calor contacta con tu veterinario de confianza de inmediato y aplica paños húmedos para hidratarles lo antes posible.

Para evitar este tipo de imprevistos en Vetplan te ofrecemos una amplia gama de soluciones para la prevención sanitaria de tu mascota, suscríbete al plan que se adapte mejor a tu mascota y ¡siéntete seguro en verano!